Adiós a Ousmane Sembene
Nació en África. Fue estibador, mecánico, carpintero y pescador. También escritor: "Le Docker Noir" es su primera novela. Pero eligió el cine para llegarle a su gente. Estudió en la Unión Soviética. Su cine: militante, profundamente africano.
Borom Sarret, Niaye, La Noire de..., Le mandat, Xala, Ceddo, Camp de Thiaroye, Guelwaar... una producción que habla de un África profunda, desconocida: la comunidad, la corrupción de las elites, un modelo familiar que cambia, el rol de las mujeres modernas, la soledad del ciudadano frente a la burocracia, el colonialismo, la pobreza... Sátiras sobre los burgueses, los líderes políticos, el fundamentalismo religioso.
Faat Kiné, Moolaadé... la trilogía inconclusa.
“Mis imágenes no son sólo para entretener y ganar dinero. Todavía adhiero a lo que dijo Lenin: ‘Un artista debe hacer dinero para vivir y trabajar, pero no debe trabajar para hacer dinero’. Creo que mis películas son una herramienta de educación. Quiero devolverles el orgullo y la dignidad a los africanos. Por eso uso, siempre que puedo, lenguajes nativos: en Mooladé se habla wolof, diola —de Senegal— y bambara, una lengua usada en Mauritania, Mali, Burkina Faso y Costa de Marfil. Mi público es Africa; Occidente y el resto son mercados. Además quiero mantener mi estética lo más cercana posible a la narrativa oral tradicional de nuestros países, con lo cual no uso nunca métodos tomados de Hollywood o el cine europeo. Mi meta, y espero lograrlo, es crear un lenguaje fílmico africano”.
Ousmane Sembene murió en Dakar, pero nos dejó sus películas, y con ellas, su fuerte compromiso con su continente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario